España: Financiando al Frente Polisario y Desperdiciando la Alianza con Marruecos

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Abdelkader EL FARSSAOUI

 

 

 

En una maniobra política cuestionable, España ha estado canalizando alrededor de 6 millones de euros anuales a los líderes de los mercenarios del Polisario, separatista en el Sáhara marroquí. Este monto, originalmente destinado a antiguos mercenarios saharauis que sirvieron en las fuerzas armadas españolas, ha terminado en los bolsillos de figuras como Ibrahim Ghali, líder de los separatistas. Esta situación es un claro ejemplo de cómo España desperdicia recursos públicos en una causa que no solo es injusta sino también perjudicial para sus propios intereses.

Según datos del Ministerio de Defensa español, estas pensiones están destinadas a antiguos combatientes saharauis que sirvieron en las fuerzas terrestres españolas, la guardia fronteriza y la policía antes del fin del colonialismo. En 2021, 1102 personas recibieron un total de 5.8 millones de euros. A lo largo de los años, el número de beneficiarios ha variado ligeramente, pero el uso indebido de estos fondos ha sido constante.

Después de la descolonización en 1975, muchos de estos mercenarios se unieron al Frente Polisario, solo para ser encarcelados por este movimiento separatista que dudaba de su lealtad. El Polisario ha manipulado estos documentos para obtener beneficios personales, vendiéndolos para asegurar la ciudadanía española y acceso a servicios sociales y médicos en Europa. Este fraude es un ultraje no solo para los verdaderos destinatarios de las pensiones, sino también para los contribuyentes españoles.

Hipocresía y Relaciones Internacionales
El apoyo de España al Frente Polisario no solo es un acto de hipocresía, sino que también socava sus propias relaciones estratégicas con Marruecos. España se beneficia enormemente de su relación con Marruecos en términos de seguridad, comercio y cooperación en áreas críticas como la inmigración y la lucha contra el terrorismo. Sin embargo, al financiar indirectamente a un movimiento que busca desestabilizar a Marruecos, España está siendo desleal con quien la apoya.

Es fundamental recordar que el Marruecos de hoy no es el Marruecos de ayer. El país ha hecho significativos avances en términos de desarrollo económico, reformas políticas y derechos humanos. Ignorar estos progresos y continuar apoyando al Polisario es un error estratégico que puede tener consecuencias negativas para España a largo plazo.

Es hora de que España reevalúe su política y detenga este flujo de fondos hacia un movimiento que no solo es ilegítimo sino también dañino para sus propios intereses. La eliminación de estas pensiones sería un paso hacia la transparencia y fortalecería las relaciones con Marruecos, un socio crucial en la región. Además, garantizaría que los recursos públicos se utilicen de manera justa y en beneficio de quienes realmente lo necesitan.

El apoyo económico de España al Frente separatista a través de pensiones destinadas a veteranos saharauis es una política defectuosa que refleja una comprensión errónea de las dinámicas actuales en el norte de África. Es esencial que España deje de desperdiciar recursos en un movimiento separatista y se enfoque en fortalecer su relación con un Marruecos moderno y en constante progreso. Solo así podrá asegurarse de que sus políticas exteriores estén alineadas con sus intereses nacionales y los principios de justicia y transparencia.

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